Se trata de la hipoteca con el diferencial más bajo del mercado y un atractivo nombre. La Hipoteca Rompedora de Deutsche Bank es la apuesta de la filial española para hacerse un hueco en este mercado, aunque con un tipo de público muy definido: clase alta y con recursos. Por eso cuenta con una serie de requisitos muy exigentes, tanto en lo referente al propio crédito como a las condiciones de contratación.Para empezar, no financia cantidades inferiores a los 200.000 euros y como mucho alcanza el 80% del valor de la vivienda en el caso de nuevas compras. Para las subrogaciones la cuantía desciende a 120.000 euros, aunque es necesario que la hipoteca tenga más de cinco años de vida. Se trata de cifras elevadas, sobre todo teniendo en cuenta que según diferentes estudios la hipoteca media en España es de 150.000 euros (aunque este es otro dato que no deja de suscitar polémica).
Para poder ofrecer el diferencial más bajo del mercado Deutsche Bank impone una serie de condiciones que restan buena parte del atractivo al producto y lo hacen accesible sólo a unos pocos. Algunos de estos requisitos entran dentro de la lógica como puede ser la domiciliación de la nómina o la contratación de un seguro de hogar o de vida, mientras que otros son algo más ‘especiales’: Este es el caso de la obligación de mantener un saldo medio mínimo en cuenta o la de efectuar un gasto superior a los 3.000 euros anuales con la tarjeta de crédito. A todo esto hay que añadir la aportación mínima de otros 3.000 euros a un plan de pensiones. Así, la entidad recupera con creces lo que deja de ingresar por su diferencial de Euribor +0,17%.