Desde principio de año las materias primas se han convertido en uno de los protagonistas del panorama internacional gracias a la subida de los precios de arroz y otros alimentos en primer lugar y al imparable rally que está experimentando el precio del petróleo.
Entre los diversos motivos de esta subida destaca el hecho de que cada vez más inversores (especialmente instituciones y gestores de fondo) utilizan las denominadas commodities como un instrumento para diversificar y cubrir sus carteras. En este sentido, se las materias primas son actualmente un nuevo mercado para los especulares. De hecho, el 70% del mercado del crudo en Nueva York ya está en manos de los especuladores.
Sin embargo, esto no quiere decir que los pequeños ahorradores e inversores no puedan sacar partido de estas subidas generalizadas que los expertos prevén que se mantengan durante el resto del año, especialmente en el caso del petróleo. Existen varias fórmulas y una de las más novedosas es la utilización del depósito de ahorro como vía de inversión en materias primas. Este tipo de productos funcionan referenciando su rentabilidad a determinadas materias primas.
En España todavía no existen demasiados productos de este estilo. Uno de ellos es el que ofrece Caixa Tarragona y que liga la inversión a cierto tipo de cereales. El funcionamiento es muy sencillo: como todo depósito garantiza el 100% y ofrece además una rentabilidad minina del 2% y máxima del 6% dependiendo de la revalorización de la soja, maíz y trigo. Aunque novedoso, la rentabilidad que ofrece no es excesiva teniendo en cuenta las dificultades para seguir la evolución de estos activos.
Además de este han surgido otros depósitos que por ejemplo buscan obtener rentabilidad del petróleo como el Brent Premier de Caixa Galicia, que está referenciado al barril Brent y garantiza el 100% de la inversión con un importe mínimo de 2.000 euros. En este caso la estructura es algo más complicada, ya que para cubrir eventuales caídas, el 50% del capital se establece como imposición fija a seis meses con un interés del 6,75% TAE y la otra mitad es la que se invierte a 12 meses refereciado al crudo.
Para los más arriesgados existen otras opciones a cargo de fondos de inversión especializados en materias primas y energía. En este caso, también se pueden diferenciar entre los fondos que invierten directamente en las materias primas y energía y aquellos que lo hacen a través de empresas que operan en el sector o que de alguna forma están presentes en la cadena productiva. De todas formas, aunque la rentabilidad puede ser mayor hay que tener en cuenta que el riesgo aumenta en igual medida y es posible perder buena parte del capital.