A continuación en Opcionis veremos cuando tenemos derecho a un abogado de oficio. Como podemos solicitarlo y cuáles son sus prestaciones.
Qué es un abogado de oficio
Un abogado se define como la persona legalmente autorizada para asesorar y defender los derechos e intereses de otra persona en materia jurídica. Así como su representante legal en un pleito.
Por otra parte, una vez determinado que es un abogado, el matiz de oficio se define como un abogado designado por un juez o tribunal para la defensa del litigante que carece de recursos económicos o para el inculpado que designa a quién lo defienda.
Es un servicio de defensa jurídica proporcionado por el Estado para aquellos que no tengan medios para pagar un abogado propio. Esta medida tiene como fin el garantizar el Derecho a la defensa que todo acusado ante la Ley tiene. Así como la asistencia necesaria para iniciar un proceso judicial.
Prestaciones de un abogado de oficio
En principio se presupone la profesionalidad de un abogado de oficio. Además de los conocimientos necesarios para defender el caso. Por tanto las prestaciones son similares a las que brinda un abogado de pago, básicamente la defensa y representación jurídica. Aún así hay una diferencia.
Un abogado de pago dedica más tiempo al caso y ofrece un servicio más exclusivo, mientras que un abogado de oficio puede tener muchos clientes de diversos tipos y puede ser un inconveniente a la hora de estudiar y preparar el caso.
Además de esto, es probable que un abogado de oficio no esté a disposición siempre que se desee. Cubre los servicios mínimos que indica la Ley de Asistencia Gratuita. Puede atender nuestro caso cuando pueda.
La asistencia gratuita incluye, no únicamente los servicios de un abogado, sino también los costes de tasas y otros pagos que hay que hacer para acudir a la justicia. En caso de acudir a un abogado de pago, será el cliente el que tenga que afrontar con estos costes.
Convocatorias para solicitar un abogado de oficio
La forma de conseguir los servicios de un abogado de oficio difiere de la utilizada para conseguir uno de pago. En este caso, la gestión no es tan sencilla como asistir o llamar a un despacho y solicitar presupuesto.
En principio se debe acreditar que se tienen unas condiciones económicas que le hagan merecedor de este servicios. Entre ellas.
Los ingresos anuales, por unidad familiar, no podrán superar dos veces el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM). Para quiénes no formen una familia, esta cifra se sitúa en 13.000 €
Según los signos externos que vienen definidos en la Ley de Asistencia Jurídica Gratuita. Considerando de esta forma las propiedades en bienes inmuebles y rendimientos del capital mobiliario que pueda tener el solicitante.
En cualquier caso, siempre se va a tener derecho a un abogado de oficio:
- Víctimas de la violencia de género, terrorismo, víctimas de tráfico con seres humanos
- Personas con discapacidad psíquica que hayan sido víctimas de maltrato
- Menores de edad
- Víctimas con secuelas permanentes a causa de un accidente
- Trabajadores beneficiarios de la Seguridad Social para reclamar por sus derechos laborales