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Cómo montar un bar en España ¿Qué necesitas? Pasos y trámites necesarios

Desde luego, montar un bar en España es una de las opciones más valoradas por todos aquellos que deciden ejercer una forma de autoempleo. Quizá se deba a la gran cantidad de demanda de personal de hostelería que tiene nuestro país y la cual ha llevado a mucha gente a adquirir experiencia previa en este sector.

Cómo montar un bar

La primera cuestión que debe saber todo aquel que quiera aventurarse en un proyecto similar es el estilo, la imagen y el ambiente del local, como medida de diferenciación del resto. es justo consignar que el estilo tradicional sigue siendo el concepto que más prevalece, aunque con toda la creciente oferta de este tipo de establecimientos se hacen necesarias ciertas estrategias de innovación.

No hay que descuidar cuestiones tales como la cartelería y publicidad exterior. La promoción del establecimiento es una prioridad en este “mare magnum” de locales existente en nuestro país.

Qué necesitar para montar un bar

En principio lo que una persona necesita es cierta experiencia en la gestión de bares o establecimientos de hostelería. Aunque la experiencia se puede adquirir, se puede hacer muy cuesta arriba comenzar a tratar con clientes y proveedores si no se posee. La calidad en el funcionamiento del negocio se puede ver seriamente dañada.

Como no, lo principal para montar un bar es disponer de un establecimiento debidamente equipado y habilitado para tal efecto. Este aspecto puede resultar lento y costoso porque en la mayoría de los casos exige una reforma profunda de las características del inmueble.

Por lo demás, solamente quedan los trámites burocráticos que veremos a continuación.

Cómo montar un bar paso a paso: trámites

Para montar un bar deberás acometer los siguientes trámites:

Ventajas y desventajas de montar un bar

Una de las mayores ventajas es la gran cantidad de demanda de establecimientos dedicados a la hostelería. Las comidas y cenas fuera de casa representan un alto porcentaje sobre el gasto total de las familias. Por consiguiente si se llevan a cabo las actividades de marketing con inteligencia puede suponer un buen negocio.

Por contra, a su misma vez existe una gran cantidad de oferta de establecimientos. Obligando ello a que se dedique mucho tiempo y recursos a la innovación, diferenciación, publicidad y demás estrategias de promoción y marketing. La competencia puede ser dura y de hecho es dura, tanto que a veces afecta a los precios y en última instancia al margen de beneficios.

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