Conocemos los acontecimientos desatados en estos últimos años a causa de la Crisis Europea. Hay una realidad que no podemos evitar, y es que la Economía global necesitará por lo menos 10 años para salir de crisis financiera de 2008.
Si analizamos la situación en general, Alemania tendría que aceptar una mayor inflación y fortalecer realmente su poder adquisitivo, como parte de la solución a los problemas en Europa. Por otra parte el ajuste en la zona euro requiere una disminución de los precios en la endeudada mitad sur del bloque y un aumento en los países centrales.
No debemos olvidar el papel del FMI, ya que el principal propósito del FMI consiste en asegurar la estabilidad del sistema monetario internacional, es decir el sistema de pagos internacionales y tipos de cambio que permite a los países (y a sus ciudadanos) efectuar transacciones entre sí.
Este sistema es esencial para fomentar un crecimiento económico sostenible, mejorar los niveles de vida y reducir la pobreza. Recientemente, el FMI ha clarificando y actualizado su cometido a fin de cubrir toda la problemática de la macroeconomía y del sector financiero que incide en la estabilidad mundial.
Es por eso que en base a las opiniones del FMI, se prevé que la economía mundial necesite por lo menos 10 años para salir de la crisis financiera que comenzó en el 2008.
Hoy en día toda la atención se centra en los problemas en Europa, pero cabe destacar que Estados Unidos también tiene complicaciones fiscales que debe resolver. Japón, por ejemplo, se enfrenta también a un ajuste fiscal muy difícil, que tomará décadas resolver. China ha captado probablemente la atención por su auge de activos, pero tiene un crecimiento más lento que antes, aunque no prevé ningún aterrizaje muy duro.
El ajuste en la zona euro requiere una disminución de los precios en la endeudada mitad sur del bloque y un aumento en los países centrales. Por otro lado, para que el Banco Central Europeo (BCE) mantenga la inflación del 2% para el bloque en su conjunto, los estados del centro del continente tendrían que tener una inflación superior al 2%, algo fuertemente resistido por Alemania, donde la hiperinflación de la década de 1920 aún perdura en el debate popular sobre las tasas de interés.
En el caso de Alemania, una tasa de inflación algo más elevada en Alemania simplemente debe ser vista como una condición necesaria y deseable, un ajuste relativo de precios.
Recordemos que teniendo en cuenta las condiciones generales de la demanda y el mandato fuerte del BCE para garantizar la estabilidad de precios, esto no es el comienzo de la hiperinflación. En la crisis de deuda, la reducción de la deuda era inevitable, pero que se debe hacer sin ahogar el crecimiento.
Sin duda, para aquellos que se preguntan ¿Qué se necesita para salir de la Crisis Financiera? Cada país tiene que encontrar el camino correcto de la consolidación.