La fortaleza del euro frente al dólar está llevando a muchos pequeños ahorradores a preguntarse cuál sería la mejor fórmula de sacar partido de esta situación. La respuesta más inmediata suele pasar por darse un capricho y aprovechar para visitar los Estados Unidos, donde además se puede renovar parte del vestuario a un precio asequible o conseguir la última tecnología a unos precios mucho más reducidos. Sin embargo, esta opción no es asequible para todos los bolsillos, ya que al tiempo que se ahorra también se incurre en un fuerte gasto. Por eso existen otras opciones.
Otra de las primeras cosas que se pasa por la cabeza de cualquier persona es comprar dólares para venderlos cuando el billete verde se recupere o incluso utilizarlos más a largo plazo en una escapada al otro lado del Atlántico. El mayor inconveniente de esta estrategia son las comisiones que habrá que soportar en el proceso de compra-venta, además del ipc en caso de que la situación se alargue más de un año. Para evitar esa depreciación lo mejor es invertir ese capital en un depósito hasta que necesitemos el dinero o queramos hacer líquida la inversión. Una variante algo más refinada consistiría en abrir una cuenta en dólares y contratar un depósito en esa misma moneda.
En estos supuestos calcular las ganancias es algo sencillo. Si por ejemplo compras dólares al cambio de 1,5 (por cada euro recibes 1,5 dólares) y los vendes a 1,1 (por cada euro recibes 1,1 dólar) tu ganancia por dólar será la diferencia entre el cambio, es decir 40 céntimos por dólar.
Los ahorradores más arriesgados pueden invertir directamente en el mercado bursátil estadounidense, donde se beneficiarán del cambio y ‘abaratarán’ el precio de los acciones, aunque también es posible acudir a fondos de inversión especializados en ese país o a los monetarios.
La otra opción es acudir a la fuente, es decir, al mercado internacional de divisas, también llamado Forex o FX. En este caso no existen comisiones por operación, aunque sí un spread entre el precio de compra y el de venta. Como ocurre al invertir en Bolsa, lo más recomendable en estos casos es buscar un bróker de confianza con el que operar. En cualquier caso hay que tener en cuenta que este es un tipo de inversión destinada a inversores avanzados.