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Los Fondos de Valores toman la delantera a los depósitos bancarios

Es complicado encontrar en el mercado depósitos bancarios con rentabilidades superiores al 1,75%. La recomendación del Banco de España de empezar a limitar el interés de este producto financiero comenzó a aplicarse a comienzos de enero y los españoles han empezado a buscar alternativas de ahorro más atractivas. Los Fondos de valores se están erigiendo como la mejor opción para los que están dispuestos a asumir un mayor riesgo.

Los Fondos de inversión serían la alternativa a los depósitos, especialmente los garantizados, pero si se quieren aumentar las ganancias de invertir habría que escalar un poco más en la asunción de riesgo y apostar por fondos que inviertan en valores.

¿Por qué Fondos de valores?

Porque los productos financieros para el ahorro preferido por los españoles pierden atractivo. El ejemplo más claro es el de los depósitos bancarios. Su limitación fija las rentabilidades en 1,75% para depósitos hasta 12 meses, 2,25% hasta 24 meses y 2,75% para más de dos años. A penas cubren la inflación. Otros productos como los planes de pensiones también pierden clientes por la nula liquidez que ofrecen en tiempos en los que puede ser necesario disponer del dinero.

Sólo en dos supuestos puede retirarse el dinero de un Fondo de pensiones lo que provoca que muchos ahorradores se lo planteen antes de decidir invertir en ellos. Enfermedad o declaración de invalidez y paro de larga duración.

Los Fondos de valores

Los Fondos de valores son fondos que invierten en valores de todo el mundo. Usted entrega su inversión que posteriormente su gestor invertirá en valores de renta variable.

Al ser inversiones de renta variable, la rentabilidad que se puede obtener es muy interesante pero también constituye un factor de riesgo. El valor del fondo se determina diariamente por lo que no es posible conocer por adelantado el rendimiento que obtendremos de nuestra inversión como sucede con los depósitos.

La rentabilidad de los Fondos valores es muy superior a la que se puede obtener de un depósito. La diversificación, la flexibilidad, la liquidez y el contar con un asesoramiento y administración profesional le ayudarán a reducir el riesgo asumido.