Si hablamos del déficit del Estado en términos de Contabilidad Nacional, podemos decir que repuntó hasta el 4,37% del PIB interrumpiendo la tendencia descendente de los dos meses anteriores.
Impacto en el PIB:
En datos homogéneos, que incluyen el adelanto de transferencias a otras administraciones públicas (esencialmente comunidades autónomas y Seguridad Social) así como la mayor realización de devoluciones de impuestos, el desfase se situó en 4,28% del PIB.
En términos de caja (una vez realizados los ingresos y pagos), el déficit se ha situado en 27.738 millones de euros, el 2,64% del PIB, frente al 2,43% registrado en el mes anterior y el 3,62% en el mismo periodo.
Algo para destacar es la eliminación de la paga extra de Navidad a los funcionarios y además en diciembre se ingresará el tercer pago fraccionado del Impuesto de Sociedades.
Sin duda las cifras son indicativas del gran esfuerzo que está realizando el Estado para controlar el déficit público, y los datos se encuentran en la senda correcta para alcanzar los objetivos fijados para este año.
Respecto a la evolución detallada de los datos, los ingresos no financieros alcanzaron los 195.142 millones de euros, un 18,9% más en términos interanuales. Los ingresos impositivos aumentaron un 1,1%, hasta superar los 152.700 millones de euros.
Recaudación por IRPF:
En el caso concreto de la recaudación por IRPF, creció un 1%, hasta los 65.910 millones, mientras que los ingresos por el Impuesto de Sociedades aumentaron un 17,7%, hasta 17.190 millones de euros, por efecto de los cambios normativos sobre los pagos fraccionados aprobados en julio y por el gravamen complementario sobre las rentas de capital.
La recaudación por IVA mejoró un 27,1%, fruto de la subida que entró en vigor en septiembre, moderando así el descenso que sufre en el conjunto del año (cae un 1,9%, aunque en la primera mitad del ejercicio llegó a caer a tasas del 10%).
Los pagos no financieros del Estado alcanzaron los 136.056 millones de euros, lo que representa un incremento del 0,1% en términos interanuales. Los sueldos y salarios del personal activo cayeron un 1,9% hasta noviembre, mientras que los pagos por intereses de la deuda se dispararon un 16,3%, elevándose a 25.537 millones de euros.
A esto se le suma los conflictos que hoy vive España con respecto al empleo, y lo que se espera para el. Los expertos consideran que, aunque no se volverá a las tasas de empleo que se registraron en años de bonanza, sí que se vivirá una ligera mejoría. Los más optimistas apuntan finales de 2013 como el inicio de la recuperación, mientras que los más prudentes creen que no se verá un cambio hasta dentro de año y medio.
Como cierre positivo podemos decir que las principales consultoras y empresas de trabajo temporal fijan el final y principios como la fecha en la que se comenzará a generar empleo.