Dentro de la estructura de los mercados pueden darse el caso en que la oferta y la demanda actúen sin que ningún agente tenga poder sobre estas dos fuerzas. Esto respondería básicamente a qué es la competencia perfecta. Sin embargo para responder a qué es la competencia imperfecta tendremos que definir primero las condiciones de la anterior. En el momento que se produzca un fallo en dichas condiciones se mostrarán las diferencias entre competencia perfecta y competencia imperfecta.
La competencia perfecta es un concepto en microeconomía que describe una estructura de mercado controlada completamente por las fuerzas del mercado. Si no se cumplen estas fuerzas, se dice que el mercado tiene una competencia imperfecta. No obstante, aunque ningún mercado ha definido claramente la competencia perfecta, todos los mercados del mundo real se clasifican como imperfectos . Dicho esto, se utiliza un mercado perfecto como estándar por el cual se puede medir la efectividad y la eficiencia de los mercados del mundo real.
¿Qué es la competencia perfecta?
La competencia perfecta es un concepto abstracto que ocurre en los libros de texto de economía, pero no en el mundo real.
Un mercado puede estar estructurado en función de los agentes que intervienen en el mismo. Me explico: en toda transacción económica debe haber un comprador (demandante) y un vendedor (oferente). Cuando dentro de un mercado hay un número significativo de demandantes y oferentes, de tal forma que ninguno de ellos puede influir en los precios tenemos un ejemplo de mercado perfectamente competitivo. O competencia perfecta.
Para ello:
- Debe haber muchos compradores y muchos vendedores, así ninguno de ellos tendrá un peso importante como para influir en las fuerzas de oferta y demanda.
- Los bienes ofrecidos deben ser homogéneos. Es decir iguales en gran medida.
De este modo lo único que mueve al mercado es la ley de la oferta y la demanda.
Teóricamente, los recursos se dividirían entre las empresas de manera equitativa y equitativa en un mercado con competencia perfecta, y no existiría ningún monopolio. Cada compañía tendría el mismo conocimiento de la industria y todas venderían los mismos productos. Habría muchos compradores y vendedores en este mercado, y la demanda ayudaría a fijar los precios de manera uniforme en todos los ámbitos.
¿Qué es la competencia imperfecta?
Una vez visto qué es la competencia perfecta y sus características, diremos pues que cuando se produce algún fallo en los elementos necesarios para que se den las condiciones, el mercado se transforma en un mercado de competencia imperfecta.
Para ello:
- Unos pocos agentes pueden intervenir en los precios alterando la oferta o la demanda y desequilibrando las fuerzas que mueven los mercados. A veces puede darse un solo oferente, como es el caso del monopolio.
- Puede darse el caso en que los productos no sean homogéneos, en tal caso los que posean productos de mayor calidad u otras características que lo hagan más atractivo podrán ganar participación en el mercado.
Sea como fuere, el caso es que en una situación de competencia imperfecta unos agentes pueden manipular los precios. Los casos pueden ser:
- Monopolio: un solo oferente y muchos demandantes.
- Oligopolio: unos pocos oferentes que a menudo actúan de forma coordinada y muchos demandantes. Un caso muy claro es el mercado del petróleo crudo.
- Competencia monopolística: en este caso el factor que influye es la falta de homogeneidad de los productos que se ofrecen.
Diferencias entre competencia perfecta y competencia imperfecta
En principio tendremos que afirmar que la competencia imperfecta no es deseable para un sistema económico, por ello los gobiernos (como agentes económicos que son) actúan en tal sentido. Ponen en marcha políticas para garantizar la competencia perfecta.
Puede darse el caso que en determinados servicios a la sociedad la competencia imperfecta sea la opción más viable. Para ello suele hacerse a través de empresas públicas. También puede que se requiera una regulación específica.
Sin embargo, como se ha comentado, la diferencia principal es la capacidad de actuación de las fuerzas del mercado (oferta y demanda). Viéndose estas fuerzas mermadas en el caso de que fallen las premisas para darse una competencia perfecta.