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Tres maneras de anticipar nómina con el banco

El hecho de no llegar a fin de mes es una constante para muchas economías domésticas en nuestro país. En ese contexto las opciones no son tantas para poder cubrir esos pequeños huecos de tesorería doméstica, en muchos casos tiramos de tarjeta de crédito y, desde luego, esta no es la mejor opción. Tal vez anticipar nómina sea una opción más adecuada, eso sí, si acertamos en la manera de hacerlo.

Aunque realmente puede existir algún modelo más de anticipo de nómina, a la hora de anticipar nómina no resultan excesivamente recomendables aquellos que, por ejemplo, pasan por generar descubiertos sobre las cuentas ya que el coste de los números rojos, como sabemos, es muy elevado.

En este artículo te mostramos en qué fijarte al contratar tu cuenta nómina 

Nos vamos a centrar en tres ocasiones bastante extendidas y relativamente fáciles de encontrar en las entidades financieras.

Anticipo de nómina

Aunque pueden tomar diferentes formatos los anticipos de nómina suelen ofrecerse como un servicio añadido a la domiciliación de ingresos. Habitualmente se nos va a presentar como una especie de préstamo pero basando el importe disponible en la nómina, y, rara vez, superando el importe de una o dos mensualidades como máximo.

En estos casos los plazos de amortización no resultan superiores a una mensualidad generalmente, y, se trata más de un anticipo a corto plazo que se salda con el ingreso de la mensualidad correspondiente, o como mucho de la siguiente. Una de las grandes ventajas de estos productos es que no suelen acompañarse de intereses.

El préstamo nómina

Se trata de una variable del anticipo nómina. Generalmente no se conciben tanto como la manera de anticipar nómina sino más bien como la manera de acceder a un préstamo personal bonificado a través de la vinculación por la domiciliación de nómina.

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Esta figura ha ido poco a poco desapareciendo del catálogo de productos de las entidades financieras, y no son precisamente el modelo más habitual de financiación en favor bien del anticipo de nómina o de los préstamos preconcebidos que veremos a continuación. La gran ventaja, con respecto a un préstamo personal estándar, es que suelen presentar una bonificación que reduce el coste por intereses.

Los préstamos preconcedidos

Se trata de un modelo de financiación que ha crecido notablemente en los últimos años. Desde el punto de vista técnico estamos ante una suerte de cuenta de crédito como las empresas, pero, en este caso, adaptada a las finanzas personales.

En este modelo la entidad, a partir de diferentes varemos, valora una cantidad determinada a crédito que pone a disposición constante del usuario. Éste crédito, una vez aprobado, no necesita más solicitudes y se mantiene vigente mientras no se disponga: es decir, mantenemos una cuenta de crédito que podemos utilizar cuando necesitamos y que al ser repuesto el dinero utilizado vuelve a activarse. La gran ventaja de este modelo es la practicidad y velocidad con la que podemos acceder a financiación, sin embargo, superando ciertas cantidades y pequeños plazo de amortización no se trata de un producto habitualmente barato.