Después del lanzamiento de BBVA con su nueva promo de la “Quincena de Ahorro” que regala un juego de baño de Ana Rosa Quintana, o el set de toallas de Victorio Lucchino que ofrece Caja Castilla- La Mancha (CCM), muchas personas se preguntan, ¿me conviene un depósito con remuneración en especie?
Ante semejante oferta como se vive en el mercado financiero español, es evidente que cada producto que sale al mercado tendrá un adepto, y es por eso que casi toda la banco ofrece este tipo de imposiciones a plazo fijo.
Tal vez, uno de los momentos más altos en cuanto a los depósitos con remuneración en especie lo comercializó Banesto con su Depósito sobre ruedas, y sí que trajo sus cuestionamientos, ya que estábamos hablando de un auto como pago.
Sin embargo, todas las cajas de ahorro y los bancos tienen depósitos que ofrecen productos en vez de dinero en efectivo, y eso quiere decir, que tienen un público que los demanda, y por lo tanto, sus seguidores. Tal vez, uno de los casos más típicos sea una oferta constante de La Caixa, y que es una especie de bandera de la entidad, el Depósito Estrella, que renueva su stock continuamente.
Pero antes que todo, debemos entender que ese “regalo” sustituirá a lo que se denomina “metálico”, es decir que en lugar de dinero, recibiremos un objeto. Entonces, ¿cómo saber si me conviene?
Este sistema es bueno siempre y cuando estemos necesitando ese producto. Es decir, si su precio de mercado es más alto que el tipo de interés que nos pagarán, es una buena oportunidad de conseguirlo, pero si al final de cuentas, sacaremos lo mismo o su precio en las tiendas es más barato, es preferible elegir un depósito que remunere en efectivo.
Otro de los puntos que debemos considerar es si nos cobrarán los gastos de envío, ya que eso contará para saber el precio final del producto.
Por lo tanto, antes de contratarlo, consulte en las tiendas el precio de mercado (generalmente la banca los consigue a precio de coste y los ofrecen más baratos que en los comercios) y analice todas las variables, porque además, los depósitos en especie, tributan en Hacienda.
Otro factor que debemos considerar es el tipo medio que ofrecen las entidades por los depósitos. Todas estas ofertas requieren de un plazo fijo estipulado, que el cliente deberá dejarlo inmovilizado en la entidad, y si la media de los depósitos es superior a lo que nos ofrecen por este producto, es mejor contratar un depósito en metálico, y después analizar que hacer con el dinero.
Por último es muy importante el tema de los impuestos. Recuerde que los depósitos con remuneración en especie tributan, por lo tanto debemos pagarle a Hacienda por ello. La nueva fiscalidad, ha castigado a los ahorristas, por lo tanto, esta forma de remuneración tiene la calificación fiscal de “rendimientos del capital mobiliario en especie” con ingreso a cuenta del 19% de la base.