Trabajar en un banco para acabar haciendo de trilero no es precisamente para lo que estudié.
Esta frase me salió de forma espontánea en la entrevista en Salvados y es una de las que más éxito mediático ha tenido. Admito que para un bancario resulta ofensivo, si no se explica el significado y el contexto de la frase. Ni todos los empleados de banca juegan al despiste con sus clientes ni todos los bancos promocionan esta forma de colocar productos. Pero es algo bastante generalizado, en un grado u otro.
Los que si parece que juegan con nuestros intereses como clientes son los directivos de banca. Los que toman decisiones en los despachos de la alta dirección. Habrá de todo, imagino, pero lo que llega huele fatal. Lo que no puede ser es que se cambien las reglas de juego siempre en beneficio del banco y nunca del cliente bancario.
Hace tiempo que comenté una circular del Banco de España que añadía un nuevo referencial hipotecario, el IRS o Interest Rate Swap, permuta de tipo de interés a 5 años, refrendado en la Orden ministerial EHA/2899/2011 (ver en PDF). Este referencial suele ser más cara que el euribor, si bien es cierto que se mantiene más estable en el tiempo: más seguridad a cambio de más coste, podríamos decir.
Detrás de esta maniobra no había, a mi modo de ver, otro objetivo que tener una alternativa al euribor más cara, para que la banca no perdiera ganancia ahora que el euribor está bajo. Lo de más seguridad para el cliente es más bien la excusa. Si tanto le preocupa a los bancos y cajas que sus clientes sufran las variaciones de tipos de interés del mercado, bastaría con potenciar la contratación de hipotecas a tipo fijo, por ejemplo. Pero esto conllevaría asumir el riesgo de tipos, y es mucho mejor que sea el cliente el que lo haga.
Si crear un nuevo tipo de referencia, el IRS, es el primer movimiento del trilero en la mesa, el próximo podría ser intentar desterrar el euribor de la oferta hipotecaria. Creo un tipo nuevo para las hipotecas y después dejo de usar el que me molesta, por ser demasiado barato para mi gusto y negocio.
Actualmente ya estamos viendo hipotecas caras, muchas con tipos cercanos a euribor + 3; como el cliente está acostumbrado a las ofertas anteriores a la crisis, más cercanas al +0,50 que al +1, los tipos actuales les resultan caros, en comparación. ¿Qué puede hacer la banca para ofrecer hipotecas caras sin que el cliente se asuste? Ofrecer un IRS más un diferencial, ya que no tenemos un punto de referencia inicial, y no estamos aún demasiado puestos en calcular TAEs y demás características de los préstamos hipotecarios.
Como en el juego callejero, movemos el euribor de un sitio a otro para, al final, perderlo de vista.