La edad de jubilación en España, desde, va en aumento. Al final se tiene como objetivo que en 2027 sea de 67 años. Este aumento se realizará de forma progresiva. No obstante, existen determinados supuestos para que una persona pueda jubilarse antes de la edad correspondiente. Como en todo, es necesario cumplir con una serie de requisitos y también conlleva consecuencias de tipo económico. Hoy en Opcionis veremos lo relativo a la jubilación anticipada y la jubilación anticipada forzosa.
Qué es la jubilación anticipada y quién puede pedirla
La edad de jubilación está aumentando hasta situarse en los 67 años, como ya se ha mencionado. No obstante existe la posibilidad de poder jubilarse antes de cumplir esa edad de forma voluntaria, siempre y cuando se cumplan una serie de requisitos. También es cierto que la pensión se ve reducida como penalización por acogerse antes de su debido tiempo al sistema de pensiones público y jubilarse de forma voluntaria.
En definitiva, un trabajador puede jubilarse voluntariamente antes de que llegue su edad para hacerlo si:
- Está dado de alta en la Seguridad Social
- Tiene una edad de 63 años
- Tiene 35 años cotizados y de los cuales dos de ellos están comprendidos en los 15 años anteriores
- El importe de la pensión que le quedaría en caso de jubilarse a la edad que le corresponde sea al menos un 125% de la pensión mínima establecida.
Qué es la jubilación anticipada forzosa y quién puede pedirla
Este tipo de jubilación es la que se produce con anterioridad a la edad que le corresponde al trabajador, pero por causas ajenas a su voluntad, la más común es encontrarse en situación de desempleo y tener una determinada edad. Edad que por otra parte suele ser un inconveniente para poder ser contratado de nuevo. Para poder acceder a la jubilación anticipada forzosa es necesario:
- Tener 61 años de edad
- Tener un mínimo de 33 años de cotización
- Ser demandante de empleo al menos los seis meses inmediatamente anteriores a la solicitud de jubilación
- Que el cese de la actividad laboral se deba a causas ajenas a la decisión del trabajador
Para estos casos se aplica un coeficiente reductor de un 7,5% de la pensión anual. No de la base de cotización, hablamos de la pensión completa.
Diferencias entre la jubilación anticipada y la jubilación anticipada forzosa
La diferencia fundamental entre ambos modos de jubilación anticipada viene determinada por la voluntariedad del solicitante. Mientras que la jubilación anticipada es un mecanismo voluntario, siempre y cuando se cumplan los requisitos demandados; en la jubilación anticipada forzosa se debe estar en una situación determinada que es ajena a la voluntad del trabajador, además de cumplir con otra serie de requisitos un poco más laxos.
Sin embargo, ambas situaciones implican una reducción del importe de la pensión a percibir por el trabajador. Esto es consecuencia de la penalización correspondiente a dejar de cotizar y percibir la prestación económica antes de su debido tiempo.
Las consecuencias económicas negativas que se producen al solicitar la jubilación anticipada (tanto voluntaria, como forzosa) se pueden suplir perfectamente si el solicitante tiene una previsión y realiza un ahorro privado (un plan de pensiones).
Ventajas y desventajas de la jubilación anticipada
Los beneficios de jubilarte son evidentes. En principio una persona tiene más tiempo libre. Pero cuidado, esto puede suponer tanto una ventaja como una desventaja si no se sabe que hacer con el tiempo.
El liberarse de las obligaciones laborales también influye en la reducción de los niveles de estrés y supone una vida más tranquila. El tiempo libre será el mismo que cuando una persona se jubila a la edad mínima ordinaria. Sólo que en este caso, la jubilación anticipada proporciona unos cuantos años más de disfrute del tiempo libre.
Es habitual que una persona con más tiempo libre y sumando el factor de tener una vida más tranquila se dedique y se preocupe más por su salud. De modo que el estado de salud de un jubilado puede mejorar. Suponiendo que el jubilado tiene una edad menor, como consecuencia de la jubilación anticipada, pueda incluso llegar a estar en buen estado cuando pasen varios años por delante.
La fuente de ingresos pasará a ser puntual y segura, se puede complementar con un plan de pensiones para no sufrir una reducción de los ingresos cuando llegue el momento de la jubilación. Porque como desventaja, está claro que los ingresos disminuyen al pasar a ser jubilado. Incluso la reducción es mayor si se trata de jubilación anticipada.
Ventajas y desventajas de la jubilación forzosa
La prejubilación, sea anticipada o forzosa tiene una serie de ventajas y desventajas, hemos visto parte de ellas en el apartado anterior. No obstante, la jubilación forzosa tiene sus propias características y tendrá también sus pros y sus contras que le son propios a ella exclusivamente.
En principio el trabajador se jubila por causas ajenas a su voluntad. Pudiendo darse el caso en que el trabajador no desee la jubilación o no tenga prevista o planificada la misma. En tales situaciones puede que sí que tenga una mayor incidencia la reducción de ingresos en su vida. Al margen de que ésta pueda ser mayor.
Por otra parte, puede suponer un alivio para el trabajador puesto que si se encuentra en situación de desempleo y, debido a su edad, no puede ser contratado de nuevo el hecho de recibir el ingreso de la jubilación forzosa puede suponerle una serie de ingresos con los cuales no contaba.
Como se puede observar, las ventajas y desventajas dependen mucho de la situación en la que se encuentre el trabajador que pasa a tal situación. Así como de si tenía planificada la posibilidad de una prejubilación.
Todas las ventajas y desventajas vienen determinadas por los ingresos, el tiempo y la calidad de vida en definitiva. Por este motivo la jubilación y prejubilación son aspectos importantes.