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¿Cuándo es necesario firmar un contrato de confidencialidad?

Si quieres saber qué es un contrato de confidencialidad y para qué sirve, sigue leyendo este artículo.

Qué es un contrato de confidencialidad

El contrato de confidencialidad es un documento mediante el cual las partes firmantes se obligan a respetar el secreto o el carácter confidencial de una determinada información que, por motivos inherentes al tipo de relación que mantienen, se hace necesario compartir. De tal modo que dicha información solamente será usada para los fines que en el propio contrato se estipulen.  Cómo todos los contratos, tiene fuerza de Ley.

Puede ser mutuo o puede afectar a una sola de las partes firmantes.

Para qué sirve un contrato de confidencialidad

Presenta una clara finalidad para los casos en que la relación laboral, mercantil o de otra índole presenta una serie de características intrínsecas en las cuales no se puede evitar el hecho de compartir cierta información clasificada. 

De este modo, mediante la firma de este documento se mantiene la confidencialidad de la información facilitada y su uso queda restringido para los fines relativos a la propia naturaleza de la relación. Los cuales deben quedar plasmados en una de las cláusulas del documento de forma precisa. Evitándose de esta forma que una de las partes pueda utilizar la información en beneficio propio o incluso la divulgación de modo gratuito.

Los tipo de información objeto de restricción más comunes son:

Cuándo es necesario firmar un contrato de confidencialidad

En cualquier caso que sea susceptible el compartir información confidencial en el marco de cualquier otro tipo de relación entre dos o más partes es necesario firmar este tipo de documento.

Los tipos de relación más comunes entre los cuales se firma un contrato de confidencialidad son los siguientes:

Qué ocurre si incumples un contrato de confidencialidad

Los tipos de contratos de confidencialidad deben tener una cláusula con las sanciones impuestas y el alcance de la responsabilidad incurrida si se incumple el acuerdo, además de la jurisdicción competente en caso de conflicto.

Es necesario añadir que la restricción al uso de la información carece de validez si el receptor ya tenía conocimiento de la información o la conoció por otras fuentes. En tales casos no se considera incumplimiento contractual.

También es necesario añadir en el propio documento una información precisa sobre el plazo de vigencia de la confidencialidad, las partes afectadas, el concepto y la finalidad de la información que se pretende proteger y posibles excepciones.

En caso de que el contrato de confidencialidad se firme en el marco de una relación laboral, lo más probable es que una de las consecuencias sea el despido disciplinario inmediato del trabajador y una demanda por daños y perjuicios, cuya cuantía quedará fijada en el propio contrato. Sin perjuicio de otro tipo de sanciones de tipo laboral.